Los retrocesos o sucesión Fibonacci son muy populares como herramienta de análisis técnico que usan muchos traders para predecir futuros precios en los mercados financieros. Usados correctamente, las tendencias de Fibonacci pueden ayudar a identificar futuros niveles de soporte y resistencia basado en el comportamiento pasado del precio.
¿Qué son los retrocesos de Fibonacci en trading?
Nacido en 1170, el matemático Leonardo Fibonacci nos ha legado herramientas como la serie de Fibonacci o la proporción áurea. La serie de Fibonacci es una serie numérica en la que cada número es la suma de los dos anteriores, por ejemplo 1, 1, 2, 3, 5, 8, 13, 21, 34, etc.
Se basa en la tasa de reproducción de dos conejos hipotéticos y el crecimiento poblacional posterior si las siguientes generaciones continuasen reproduciéndose. A primera vista, puede ser difícil ver la conexión entre un matemático del siglo XII, la tasa de reproducción de los conejos y usar análisis técnico para predecir qué dirección seguirán los mercados financieros. Así que, ¿por qué esta secuencia numérica tiene tanta importancia para los traders?
La proporción áurea
La clave está en el ratio entre los números de la serie y este es el aspecto más importante del trabajo de Fibonacci. A medida que avanza la serie, si dividimos cualquier número de la serie por el número anterior el resultado es 1,618. Es lo que se conoce como la «proporción áurea». Los seguidores de Fibonacci afirman que existen numerosos ejemplos de la proporción áurea en la naturaleza que cumplen con esta regla (o con su inverso, el 0,618). Parece que tiene un gran peso en los componentes básicos de todo lo que nos rodea, incluyendo los seres humanos, el arte y la arquitectura.
Retrocesos de Fibonacci
Los seguidores de Fibonacci argumentan que si gran parte de la naturaleza y del mundo que nos rodea sigue esta proporción, es muy probable que los mercados también lo hagan. Uno de los usos que dan los analistas a estos números es a través de los retrocesos de Fibonacci. Imaginemos, por ejemplo, un mercado que ha avanzado al alza y que, como todos los mercados, no avanza en línea recta, por lo que empieza a caer. Los traders emplean la sucesión de Fibonacci para intentar averiguar hasta dónde llegará la caída antes de que el mercado retome su tendencia alcista. Se puede vincular su teoría con todos mercados que ofrecemos, ya sea Fibonacci en Bolsa, materias primas o fondos.
¿Qué es la secuencia de Fibonacci?
La proporción áurea de 1,618 –el número mágico– se traduce en tres porcentajes: 23,6%, 38,2% y 61,8%. Esos son los tres porcentajes más populares, aunque algunos traders también tienen en cuenta los niveles del 50% y el 76,4%. El 50% no es un número de Fibonacci pero ha demostrado ser una cifra muy habitual en la corrección de un movimiento de precios primario o secundario. De momento, nos quedaremos con el 50% y los dos porcentajes de Fibonacci más populares: 38,2% y 61,8%.
Los aplicamos al gráfico para intentar identificar niveles potenciales de soporte y resistencia en el mercado. Cuando el mercado cede un 38,2% de su avance previo (el primer gran retroceso de Fibonacci), los traders estarán atentos por si entran compradores. Si el precio cae por debajo del nivel del 38,2%, el objetivo pasa a situarse en el retroceso del 50%. Cuando el mercado atraviesa también ese nivel, los traders esperarán a ver si la caída del mercado se acaba parando en el 61,8% del avance previo. Si no lo hace, la mayoría de los seguidores de Fibonacci considerarán que el mercado está volviendo al punto de inicio.
Podemos crear retrocesos de Fibonacci si tomamos un máximo y un mínimo (o dos puntos extremos) en un gráfico y dividimos la distancia vertical en los porcentajes que hemos mencionado. Una vez identificados los niveles, se pueden dibujar líneas horizontales para identificar posibles resistencias y soportes.
La sucesión de Fibonacci: ejemplos
El siguiente ejemplo recoge el aumento del precio del petróleo crudo West Texas Intermediate (también llamado crudo WTI). Cuando el mercado se para, los traders aprovechan para aplicar los retrocesos de Fibonacci a ese rally y ver dónde se sitúa el soporte. Como puede verse, el precio cae y, aunque lo atraviesa brevemente, el retroceso del 38,2% en el nivel de los 35 dólares acaba ofreciendo cierto soporte. Luego, el mercado rebota y alcanza nuevos máximos en su recuperación.
¿En qué consisten los retrocesos de Fibonacci?
Fibonacci no se aplica únicamente a mercados alcistas. En mercados bajistas, los fans de Fibonacci trading aplicarán los retrocesos para predecir la recuperación. Pensemos por ejemplo en un mercado que ha caído 100 puntos. Si gana un 38,2%, los seguidores de los retrocesos de Fibonacci esperarán que el rally pierda impulso. Si ese nivel se supera, situarán en el 50% el punto en el que el mercado volverá a caer. Por último, si ese nivel también se sobrepasa, el objetivo se fijará en el retroceso del 61,8%. Una ruptura de ese nivel sugeriría que el mercado avanzará hasta el punto en el que empezó a caer.
El siguiente gráfico muestra una caída en el GBP/USD. El par de divisas cayó desde el 1,5200 al 1,4100 antes de estabilizarse. Cuando el mercado se calmó, la caída pudo analizarse desde la óptica de los retrocesos de Fibonacci. Como puede observarse, cuando el mercado había recuperado un 50%, la recuperación perdió fuelle y el mercado retomó la senda bajista. En este ejemplo, el retroceso de Fibonacci nos ayuda a decidir cuándo tomar una posición bajista o alcista.
No a todo el mundo le gusta aplicar la serie de Fibonacci al análisis del mercado. Para algunos, los niveles no son más que profecías autocumplidas (debido a la cantidad de gente que sigue estos porcentajes) y no tienen ninguna propiedad «mágica». Pero, incluso para los escépticos, pueden ofrecer información adicional sobre potenciales puntos de inflexión del mercado que podrían no resultar tan obvios a primera vista, a través del análisis técnico que sigue.
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