Una estadística revela que la nueva red de Ethereum, nombrada Ethereum 2.0 o capa de consenso, presenta un nivel grave de centralización. El 66,9% de los validadores usa el mismo cliente, Prysm. Esto podría poner en riesgo la seguridad de la cadena de bloques en el futuro.
Según estadísticas presentadas por el sitio pools.invis.cloud, dos tercios de los validadores de la capa de consenso utilizan el cliente Prysm. Es decir, eligen ese programa para implementar el protocolo de Ethereum 2.0 en sus nodos. Esto es considerado una emergencia por el alto estado de centralización de la red.
Con respecto a los demás clientes más escogidos, el desarrollador Jonathan Cook (usuario jmcook.eth) detalla en una publicación en Mirror.xyz que estos son Lighthouse, con un 21,8%, y Teku, con 14,1%. Nimbus, Grandine y Lodestar son otros de los más utilizados, según clientdiversity.org.
algo muy importante para tener en cuenta es la amplia ventaja de Prysm sobre los demás clientes entre los exchanges de criptomonedas más importantes. De acuerdo con los datos citados, casas de cambio como Coinbase y Kraken, que cuentan con 48.000 y 30.000 validadores respectivamente, tienen un uso de Prysm superior al 90%.
Asimismo, otros exchanges como Binance, con 24.000 validadores, usa este cliente en más del 76% de los casos. Si bien poseen muchos menos validadores, también podrían añadirse a esta lista exchanges como Bitstamp, OkeX, KuCoin y Gemini.
¿Por qué es peligrosa esta centralización en Ethereum?
Al analizar este caso cualquier persona podría pensar que, si Prysm es el cliente más usado y con tanta ventaja sobre el segundo de la lista, debe ser porque es el más eficiente. Sin embargo, se trata de algo poco conveniente porque, en caso de existir una falla con este cliente, la red completa se vería en una situación comprometida.
Como explica el artículo citado de pools.invis.cloud, esto es peligroso por dos razones. En primer lugar, porque habría un número mayor de validadores afectados en caso de que Prysm presente una falla.
Y por el otro lado, esta centralización puede ser penalizada por la Beacon Chain en caso de mala praxis por uno de los clientes. Cuando la cadena detecta un validador corrupto, resta ethers de los que el validador tiene depositados, de modo que los validadores buenos tengan mayoría nuevamente.
De acuerdo con el artículo de Jonathan Cook, si un bug afectara a un cliente con una dominancia de un tercio de la red, esto podría no causar consecuencias mayores. Esto se debe a que se necesita el consenso de al menos dos tercios de los validadores para confirmar un bloque.
Sin embargo, en caso de verse comprometidos al menos dos tercios de los validadores, podrían producirse inconvenientes graves, como la quema de los ether en staking o incluso una bifurcación de la Beacon Chain, con información incorrecta grabada en la historia de Ethereum para siempre.
Ethereum se prepara para su actualización a Ethereum 2.0
Mas adelante, la red principal de Ethereum se fusionará con la denominada Beacon Chain, es decir, el primero de los fragmentos que compondrán la nueva cadena de bloques. Con esa fusión, Ethereum pasará de funcionar con prueba de trabajo (PoW o proof of work) a una nueva modalidad con prueba de participación (PoS o proof of stake)