Los costos laborales en Estados Unidos aumentaron fuertemente en el segundo trimestre, ya que la rigidez del mercado del trabajo siguió impulsando el aumento de los salarios, lo que podría mantener la inflación elevada y dar a la Reserva Federal cobertura para continuar con sus agresivas alzas de las tasas de interés.
Al borde de la recesión
Otros datos del viernes mostraron que el gasto de los consumidores se aceleró en junio, aunque el repunte estuvo ligado al aumento de los costos de la gasolina y de otros bienes y servicios, con el mayor incremento mensual de los precios desde 2005. El avance de la inflación contribuyó a la contracción de la economía en el primer semestre de este año, dejándola al borde de la recesión.
“La Reserva Federal seguirá luchando por tratar de controlar la inflación sin que la economía entre en recesión”, dijo Dante DeAntonio, economista de Moody’s Analytics en West Chester, Pensilvania. “Los datos sobre el crecimiento de los salarios y los precios no les harán ningún favor, ya que la presión al alza se mantiene claramente a pesar de que la economía en general se ha debilitado”.
Costos laborales se incrementan
El Índice de Costo del Empleo (ICE), la medida más amplia de los costos laborales, aumentó un 1,3% el pasado trimestre tras acelerarse un 1,4% en el periodo enero-marzo, según el Departamento del Trabajo.
Los economistas habían previsto que el ICE subiera un 1,2% en el segundo trimestre. Los costos laborales crecieron un 5,1% en términos interanuales, la mayor alza desde que se inició la serie actual en 2001, tras aumentar un 4,5% en el primer trimestre.