En el año 2017, Didi Taihuttu, junto a su familia, invirtieron una cuantiosa parte de sus bienes en criptomonedas. En ese entonces, las monedas digitales BTC tenían un precio de 900 USD (actualmente, los Bitcoins llegan a valuarse en 47.000 USD).
Fortuna de criptos
La criptofamilia, asegura que su fortuna está repartida por varios continentes, principalmente en Asia, Europa y Australia, con la seguridad de bóvedas frías, es decir, espacios herméticos sin conexión a Internet. Esta sería una medida preventiva ante posibles ataques de piratas informáticos. No obstante, una parte de su riqueza está almacenada en la plataforma de criptocomercio Coinbase.
Utopía digital
Dentro de los ambiciosos planes del empresario de activos digitales, se encuentra la construcción de una Criptoaldea, para la cual, Portugal sería la locación ideal.
Esta aldea blockchain estaría compuesta por 25 casas, en las que se espera un constante intercambio de conocimiento especializado sobre criptoactivos y filosofía blockchain.
Con esto Didi Taihuttu, espera que Portugal se vuelva sede cosmopolita de criptomonedas, especialmente de BTC.