El uso de criptomonedas, podría ayudar a Rusia y sus multimillonarios a burlar el impacto de las sanciones internacionales aplicadas sobre el país, debido a su avanzada militar en contra de Ucrania.
El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, autorizó una serie de sanciones económicas en contra de Rusia, en respuesta a la invasión a Ucrania. Estas sanciones tienen como objetivo, limitar a Rusia de su capacidad para hacer negocios en dólares y otras monedas internacionales.
La respuesta estadounidense, incluye sanciones a cinco bancos rusos que poseen un capital acumulado de aproximadamente $1.000 millones de dólares en activos. Además, un amplio número de «élites rusas» y sus familiares, también serán sancionados.
Las sanciones impuestas a empresas e individuos rusos por parte de los Estados Unidos y sus aliados, podrían básicamente cerrarles las puertas a Occidente. No obstante, los multimillonarios rusos, podrían eludir estas sanciones si eligen utilizar criptomonedas. Las cuales gracias al uso de la tecnología Blockchain pueden mantener a las transacciones de forma anónima. Permitiéndoles adquirir bienes y servicios fuera de Rusia, burlando a las sanciones.
«Si dos personas u organizaciones desean hacer negocios entre sí, y no pueden hacerlo a través de los bancos, pueden hacerlo por medio del Bitcoin. Si a una persona rica le preocupa que sus cuentas puedan congelarse debido a las sanciones, simplemente pueden mantener su riqueza en Bitcoins para protegerse». Dijo Mati Greenspan, director ejecutivo de Quantum Economics.
El Departamento del tesoro de Estados Unidos es muy consciente de este problema. En un reporte de octubre, los funcionarios advirtieron que las monedas digitales «reducen potencialmente la eficacia de las sanciones estadounidenses» al permitir que los «malos actores» retengan y transfieran fondos fuera del sistema financiero tradicional.
Las criptomonedas como refugio ante las sanciones internacionales
A diferencia de las monedas fiduciarias, que deben movilizarse a través de instituciones bancarias que tienen la capacidad de rastrearlas, congelarlas o bloquearlas. Las criptomonedas pueden enviarse directamente de una persona a otra, de manera totalmente anónima y sin restricciones producto de las sanciones gubernamentales u otras restricciones.
Los poseedores de criptomonedas, también pueden configurar una red de billeteras con diferentes direcciones en varios exchanges, lo que hace que sea extremadamente difícil rastrear cualquier transacción y aún más difícil vincular las transacciones con un individuo en particular. Además, pueden elegir exchanges de criptomonedas que no se encuentran en jurisdicciones que imponen sanciones y, por lo tanto, no necesariamente tienen que cumplir con las regulaciones.
Sin embargo, los activos en criptomonedas no podrán convertirse de manera sencilla en monedas fiduciarias, según los expertos. Y eso probablemente afecte las transacciones y operaciones comerciales de Rusia, debido a que no todas las empresas e instituciones aceptan criptomonedas, lo que limitaría su capacidad comercial hoy en día.
Los rusos afectados por las sanciones son «personas que se beneficiaron personalmente de las políticas del Kremlin y deberían compartir el dolor. Mantendremos el ritmo de esas designaciones contra los multimillonarios corruptos en los días venideros». Dijo el presidente Biden, por medio de un comunicado el día jueves.
Hasta el momento, ninguno de los ciudadanos rusos sancionados ha revelado públicamente si son o no, poseedores de criptomonedas.